Hola, ¡buenos días! Hoy les traigo el siguiente refrán: ¿A quién le dan pan que llore? Lo usamos para remarcar una situación en la que nos vemos sumamente favorecidos sin tener que dar nada (o casi nada) a cambio, o para todo aquello que obtenemos de manera gratuita o sin mucho esfuerzo de nuestra parte.
